Una iglesia viva en la Adoración y el Servicio

Para leer este mensaje en inglés, haga clic aquí: https://iglepidom.org/a-church-alive-in-worship-and-service/

Para toda la humanidad estos tiempos han sido muy difíciles. Durante un año y medio hemos tenido una pandemia que todavía hoy nos ha distanciado. No podemos abrazarnos ni darnos La Paz como lo hacíamos antes. Entre todo lo que pasado hemos visto personas que han sufrido el COVID 19, unos han sobrepasado la enfermedad, pero otros tristemente han partido de este mundo debido a los efectos de la misma. Asimismo muchas personas por el temor de sufrir esta enfermedad, o por el aislamiento que han sufrido al estar encerrado mucho tiempo en su casa y la por incertidumbre vivida , han sido afectado emocionalmente. Este estado emocional ha llevado a muchos a recibir atención sicológica. En nuestro país muchos perdieron sus empleos y otros negocios informales. Las escuelas fueron cerradas por un largo tiempo y los niños y niñas y jóvenes estudiantes, tuvieron que permanecer en sus hogares. Las autoridades todavía siguen tomando medidas sanitarias para que esta terrible enfermedad no se continue propagando.

Además, de estos acontecimientos, han habido otros que nos han conturbado fuertemente como es el terremoto sucedido al Sur de Haití. Lo triste de esta calamidad sucedida en Haiti es la impotencia que hemos sentido de no poder ayudar como quisiéramos debido a la situación de inseguridad que vive este vecino país. Esto ha sido muy lamentable para nosotros. Oramos por este pueblo para que encuentre solución a sus graves problemas.

A pesar de todo esto no hemos perdido la esperanza. Nuestra iglesia ha dicho presente ante las consecuencias producidas por el COVID 19, ofreciendo soporte y ayudando espiritual, emocional y material a sus miembros y en sentido general a todo el país. Un aspecto a destacar es uso que la iglesia ha hecho de las plataformas virtuales. Mediante estos medios ha llevado aliento y esperanza, orientando a toda la ciudadanía, haciendo programas de estudios bíblicos, realizando retiros, momento de alabanza y reuniones de fortalecimiento espiritual. También mediante las plataformas digitales y programas presenciales ha ofrecido asistencia sicológica.

En lo social ha llevado alimentos a los más necesitados, medicinas a distintas familias y ha acompañado a algunos de los enfermos y familiares. Por tanto, iglesia ha sabido responder a toda estas situaciones con amor y esperanza, confiando siempre en el poder de Dios.

Durante gran parte de este tiempo las visitas pastorales se mantuvieron y algunas de las iglesias visitadas tuvieron confirmaciones. Actualmente mantenemos este mismo programa de visitas pastorales y reuniones con las distintas Juntas de cada una las Misiones visitadas. Todo esto para la gloria de Dios.

Ahora damos gracias a Dios porque estamos paulatinamente entrando a la normalidad, aunque debemos ser precavidos siguiendo las normas sanitarias. Gracias a Dios nuestros estudiantes han comenzado asistir a nuestras escuelas, nuestras iglesias han comenzado a realizar actividades presenciales y ya hemos comenzado a recibir grupos misioneros. La economía del país ha ido mejorando significativamente.

La mayoría de la población dominicana se ha vacunado con dos o tres vacunas. Esto ha sido un gran paso.

Yo agradezco a Dios estar en iglesia que Adora continuamente y vive cada día la esperanza. La esperanza de que a pesar de las dificultades podemos servir a las comunidades ofreciendo un testimonio de lo que puede hacer Dios en nuestras vidas.La esperanza de que juntos como pueblo podemos trabajar para superar esta y otras dificultades. La esperanza de que la ciencia seguirá avanzando para poder llevar sanidad y paz al mundo. Dios está obrando para llevar cabo su propósito de llevar todo a la perfección. Po eso debemos adorarle siempre.

Muchas bendiciones todos y todas.

Rvdmo. Obispo Moisés Quezada Mota
Obispo Diocesano

3 de noviembre de 2021